En L’ATELIER creemos que los espacios tienen el poder de emocionar, de conectar y de contar historias. Por eso nos ilusiona especialmente trabajar en la reforma integral del hotel Los Dragos, en el sur de Tenerife. Un enclave con alma propia, frente al mar, que hoy reinterpreta su identidad desde un nuevo lenguaje de diseño.
Este proyecto nos permite transformar no solo sus habitaciones, sino también sus zonas comunes, aportando una nueva mirada: más fresca, más viva y más alineada con el viajero de hoy.
Una nueva forma de habitar Los Dragos
La premisa ha sido clara desde el inicio: crear un hotel con carácter, autenticidad y alma. Un espacio que hable de cercanía y de color. Que se aparte de lo convencional para explorar una estética más vital y genuina.
El diseño se construye a partir de una paleta cromática enérgica —corales, mostazas y azules— que llena de optimismo cada rincón, equilibrada con materiales nobles como la madera de roble y haya, que aportan naturalidad y calidez.
El resultado es un hotel con un lenguaje visual propio, que transmite alegría y personalidad desde el primer paso.
Diseñar para conectar
Los Dragos siempre ha sido un hotel con identidad, y ese carácter tan definido ha sido el punto de partida para esta nueva etapa.
Desde L’ATELIER proponemos un diseño que apuesta por un estilo más emocional. Hemos querido ir más allá del sol y la playa, para crear ambientes que inviten a quedarse, a disfrutar y a recordar.
La luz natural, las texturas orgánicas y una distribución pensada para favorecer el confort definen unos interiores donde cada decisión de diseño ha sido tomada para emocionar.
Porque en L’ATELIER no solo diseñamos espacios: creamos atmósferas que escuchan, emociones que hablan.
Un hotel que evoluciona sin perder su alma
Esta reforma integral es también una oportunidad para reivindicar la historia de Los Dragos y proyectarla hacia el futuro.
Hablamos de un rediseño que no borra lo que fue, sino que potencia su esencia y su autenticidad. Que reconecta el hotel con su entorno, pero desde un lugar más conceptual, más honesto, más coherente con los nuevos estilos de vida.
Muy pronto presentaremos el resultado de esta transformación, en la que cada color, textura y pieza de mobiliario ha sido elegida con un propósito: dar vida a un hotel que mira al mar con nuevos ojos y lo hace desde el lenguaje del diseño emocional.



